Las dos muertes de Leandro 'El Patrón' Norero

La ‘resurrección’ y muerte de Leandro Norero, El Patrón. 

Considerado por las autoridades antinarcóticos como uno de los principales narcotraficantes y lavadores de dólares, Norero se presentaba como un exitoso empresario. Pero no lo era. 

Financiaba a Los Lobos con el dinero del narcotráfico. Apoyaba a bandas vinculadas al cartel mexicano Jalisco Nueva Generación. Y hasta montó una organización criminal que incluye un enjambre de empresas de venta de vehículos, transporte. 

Pero más allá de sus tentáculos en el narcotráfico, lo que a muchos continúa sorprendiendo son sus agallas. ¿Quién finge su muerte? Él. 

Y aprovechó la pandemia. 

Pedido de extradición

Vivía en Perú. En 2020, la justicia de ese país inició un proceso en contra de Norero, ecuatoriano de 34 años, por el delito de tráfico ilícito de drogas en agravio al Estado peruano.

El 5 de febrero de ese año, la Segunda Sala Penal de la Corte Superior de Justicia del Callao, según información a la que accedió PRIMICIAS, solicitó dar paso a la solicitud de extradición. 

Incluso, el presidente peruano de entonces, Martín Vizcarra, se sumó a dicha petición. 

Entonces, los días de Norero estaban contados en aquel país. 

Pero, el caso se archivó. 

Norero había 'muerto' con Covid-19. Y su defensa presentó un certificado de defunción que, según el portal peruano Hildebrandt, lo tramitó Darwin Soto Martens y lo firmó el médico Dante Ángeles Chafloc, de Chiclayo.

Más adelante se supo que, supuestamente, a Soto le habían usurpado su identidad, tras perder sus documentos. Y Chafloc negó, según el portal, que había firmado ese documento. 

Era un certificado falso. 

La 'resurrección'

El miércoles 25 de mayo de 2022, Norero 'resucita' en un operativo dirigido por la Fiscalía. La Policía lo capturó en uno de los 19 allanamientos que se hicieron en Guayas, Manabí y Santa Elena.

Se le incautaron 42 lingotes de oro. Casi siete millones de dólares. Más dinero. Relojes de marcas Rolex. Armas. Botellas de licor.

El 26 de mayo, un día después de su 'resurrección', se inició un proceso en su contra por lavado de activos. Además, tenía otros por tráfico de drogas y por integrar una red de corrupción en hospitales de Ecuador. 

Pronto lo llevaron al CRS de Cotopaxi. 

Intentó salir de prisión en julio con varios pedidos de habeas corpus y apelando a la prisión preventiva, según la función judicial. Pero no pudo. 

El 3 de octubre de 2022, en el CRS de Cotopaxi hubo un motín y enfrentamientos entre organizaciones narcocriminales. Asesinaron a Norero. Su segunda muerte. La final.