Hasta el momento, la Policía no tiene un reporte de un presunto ataque en el puerto pesquero Puerto Plata de Esmeraldas, pero en las últimas horas se capturó a tres supuestos terroristas.
En medio de la crisis carcelaria y atentados que sacuden al país, en el centro de rehabilitación de Esmeraldas aún hay 13 funcionarios penitenciarios retenidos por los presos, hasta la mañana de este 13 de enero.
Por ello, en declaraciones a PRIMICIAS, la Comandancia de la Policía en la Subzona Esmeraldas detalló que sus esfuerzos se concentran en liberar los rehenes.
Para esta tarea, se conformó un comité de crisis liderado por el recién nombrado Gobernador de la provincia, el coronel Javier Buitron.
De este comité salieron varias disposiciones y la principal es acercamiento con los captores para lograr la liberación de los funcionarios secuestrados.
Además, según información policial, en las últimas horas se ha evidenciado una relativa calma en esa localidad del norte del país que, entre el lunes y el martes, vivió jornadas de violencia y atentados.
Hasta el momento, la Policía no registra información sobre un presunto ataque en el puerto pesquero Puerto Plata de la provincia, aunque en redes sociales se ha publicado un video del patrullaje policial y militar en la zona
Detenidos en Esmeraldas
Por otra parte, las capturas y allanamientos no han parado en esa provincia desde que el presidente Daniel Noboa decretó la existencia de un conflicto armado interno, reconociendo que en el país hay una guerra interna con el crimen organizado.
En horas de la noche de ayer y madrugada del 11 de enero se detuvo a tres personas sospechosas de participar en actos de terrorismo con la incineración de carros y amedrentamiento a funcionarios públicos.
En su poder, se encontró una motocicleta reportada como robada, un arma de fuego, vestimenta y envases con combustible que, según las autoridades, iban a ser usados en otros atentados.
En otro punto, se allanó una especie de vivienda que serviría como refugio de los delincuentes. Allí se encontró una alimentadora con varios cartuchos, un arma de fuego y varios teléfonos celulares. Además, máscaras que les serviría para ocultar su identidad.
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