La aceptación del gobierno del presidente Joe Biden hacia los venezolanos se extenderá para los ciudadanos de Cuba, Nicaragua y Haití. No así para otros países como Ecuador, Colombia y Perú.
Estados Unidos anunció este jueves que aceptará a más de 30.000 migrantes al mes de Venezuela, Cuba, Nicaragua y Haití. De esta forma, extiende un programa por el que ya concede actualmente permisos humanitarios a venezolanos.
Funcionarios de alto rango de la Administración del presidente Joe Biden informaron que, en paralelo, Estados Unidos expulsará "de inmediato" a México a los migrantes de esos países que intenten cruzar a su territorio de manera irregular.
Blas Nuñez-Neto, Subsecretario Interino de Política Fronteriza e Inmigración del Departamento de Seguridad Nacional, informó que la expulsión inmediata se mantendrá para los ciudadanos de otras nacionalidades que intenten ingresar de manera irregular.
El funcionario puntualizó los casos de ecuatorianos, colombianos y peruanos, que han arribado "más y más" hasta la frontera sur del país en las últimas semanas. Según Nuñez-Neto, hay un promedio diario de 8.000 migrantes que llegan hasta allí.
Sin embargo, el funcionario anunció que la administración de Biden seguirá luchando ante los tribunales de justicia para que se dé de baja el Título 42 que, bajo el argumento de la pandemia, permite que se mantenga la expulsión inmediata.
Con la inclusión de cubanos, haitianos y nicaragüenses, se amplía el programa que Estados Unidos lanzó en octubre pasado para entregar 24.000 permisos a migrantes venezolanos y, al mismo tiempo, deportar a México a quienes atravesaran la frontera sin permiso.
Quienes sean deportados al país vecino del sur por cruzar irregularmente, no podrán acceder a los permisos humanitarios, y tampoco solicitarlos.
Asimismo, Estados Unidos quiere triplicar "el reasentamiento de refugiados" procedentes de otras partes del continente en el año fiscal 2023. Así, acogerá a hasta 20.000 personas provenientes de naciones de Latinoamérica y del Caribe.
El presidente Biden visitará el próximo domingo, y por primera vez la frontera con México desde que llegó al poder hace dos años. El mandatario se trasladará a El Paso, Texas.
Durante su visita, el jefe de Estado pretende "abordar las operaciones de aplicación de la ley" y se reunirá con funcionarios locales.
El mandatario visitará El Paso antes de visitar México el lunes y el martes para reunirse con su homólogo mexicano, Andrés Manuel López Obrador, y el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau. Es su primer viaje al país vecino del sur y a una nación latinoamericana desde su llegada a la Casa Blanca.
Lo último