Tras el incidente que dejó cuatro fallecidos, moradores se concentraron en la Capitanía de Puerto Ayora para exigir mayores controles a las embarcaciones. El Ministerio de Turismo llamó a la corresponsabilidad de los transportistas marítimos.
Luego de 24 horas del naufragio de la lancha 'Angy', que dejó cuatro fallecidos, un grupo de moradores protestó en los exteriores de la Capitanía de Puerto Ayora, en Galápagos, para exigir mayores controles a las embarcaciones.
Varios isleños se quejaron por el retraso en las acciones de atención, búsqueda y rescate de las víctimas del naufragio.
Una de las manifestantes dijo que no era la primera vez que ocurría un percance con una embarcación, pero sí la primera con un desenlace fatal.
Otros habitantes exigían la remoción de los representantes de la Armada del Ecuador en Galápagos.
Según uno de los moradores, los familiares de las víctimas aún no recibían los cuerpos de los fallecidos.
Más temprano, Pablo Caicedo, titular de la Dirección Nacional de los Espacios Acuáticos (Dirnea), recordó que los controles, para emitir certificados de seguridad a las embarcaciones, se realizan una vez al año.
Lo que se revisa cuando zarpa un barco es la lista de pasajeros que se embarcan.
Las quejas de los ciudadanos iban dirigidas a la Armada, porque ninguno de los turistas tenía chaleco salvavidas y hubo exceso de pasajeros en la lancha.
Según la autoridad naval, el naufragio pudo ocurrir porque la embarcación se quedó sin combustible en mar picado y sus tres motores dejaron de funcionar.
En tanto, el Ministerio de Turismo lamentó lo ocurrido en Galápagos, e hizo un llamado a la corresponsabilidad de los transportistas marítimos, para que tomen los correctivos necesarios en sus embarcaciones.
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