Uno de los abogados de Fabricio Colón Pico informó que el plantón es para pedir que el detenido no sea trasladado desde Riobamba a Guayaquil.
Un grupo de ciudadanos hizo un plantón en respaldo al delincuente Fabricio Colón Pico, a quien la fiscal general del Estado, Diana Salazar, acusó de liderar un plan para atentar contra ella.
El plantón se cumplió la mañana del lunes 8 de enero en los exteriores del Servicio Nacional de Atención a Personas Privadas de La libertad (SNAI) en Quito. Varias personas acudieron con carteles en los que se leía "No al traslado de Colón Pico".
Diego Aluisa, uno de los abogados de Colón Pico, explicó a la plataforma digital Ecuador Chequea que el plantón se dio para solicitar que las autoridades no trasladen a Colón Pico desde la cárcel de Riobamba a Guayaquil.
El sábado 6 de enero, un juez dictó prisión preventiva contra Colón Pico por el presunto delito de secuestro y fue llevado a la cárcel de mediana seguridad de Riobamba.
"La gente está respaldando al señor Fabricio Colón Pico para que no sea trasladado, para que no corra peligro su vida... A mi cliente lo quieren enviar a Guayaquil y prácticamente van a atentar contra la vida de él", aseguró el abogado Aluisa.
Este lunes también circuló un video en redes sociales, en donde aparece Fabricio Colón Pico y responsabiliza al presidente Daniel Noboa y a la fiscal Diana Salazar por lo que le pueda ocurrir.
"Si me llega a pasar algo, si me llegan a matar, hago responsable directamente al presidente y a esta señora Diana Salazar", expresó.
Detonaciones en la cárcel de Riobamba
Esta mañana, también hubo un plantón en los exteriores de la cárcel de Riobamba, en donde Colón Pico está recluido.
En los exteriores de la cárcel existe un fuerte resguardo policial y militar, mientras al interior se escucharon varias detonaciones.
Los militares se alistaban para ingresar, pero se detuvieron cuando empezaron las detonaciones.
Una situación similar se vive en otras cárceles del país. Esta mañana, se reportaron amotinamientos en El Inca, en Quito, y Turi, en Cuenca.
También hay presencia policial y militar en los centros de rehabilitación social de Latacunga, Ambato y Machala.
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