Los cubanos salieron a las calles la noche del viernes 30 de septiembre, para protestar por los continuos apagones en varios barrios de La Habana.
El huracán Ian azotó fuertemente el oeste de Cuba a principios de esta semana y dejó sin luz a todo el país de 11 millones de habitantes.
Si bien el Gobierno asegura que el 60% del servicio ha sido restaurado en La Habana, una ciudad de más de dos millones de habitantes, decenas de personas sostienen que siguen sin servicio eléctrico.
Por ello, la noche del viernes se cumplió el segundo día de protesta en la capital cubana, marcando una de las manifestaciones individuales más grandes desde julio de 2021.
Al menos una de las protestas en el barrio occidental de Playa se incrementó a varios cientos de personas que coreaban "enciendan las luces". También gritaban consignas antigubernamentales que criticaban al presidente cubano, Miguel Díaz-Canel.
En un momento, el grupo comenzó a corear "libertad", mientras los manifestantes caminaban por un barrio densamente poblado sin luz.
A medida que la protesta en Playa ganaba fuerza, fue recibida por varios camiones de las fuerzas de seguridad con boinas negras impidiendo el paso a los manifestantes.
Las protestas callejeras en Cuba son muy raras. El 11 de julio de 2021, manifestantes antigubernamentales sacudieron el país, en lo que se consideran los disturbios más grandes desde la revolución de Fidel Castro en 1959.
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