Elon Musk busca controlar una playa pública, y el estado de Texas está cerca de permitirlo
Un proyecto de ley aprobado por el Senado de Texas propone que se reconozca como ciudad a un campamento levantado por Musk para trabajadores de SpaceX, y que esta tome control de una playa pública.
Fotografía de archivo de la playa de Boca Chica en la que se ve las instalaciones de Starbase en el fondo e instalaciones de la empresa SpaceX, de Elon Musk.
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Alexander Hatley (CC BY)
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Elon Musk, el hombre de confianza de Donald Trump que podría estar próximo a irse de la Casa Blanca, está envuelto en una polémica inusual pues este magnate busca controlar una playa pública ubicada cerca de instalaciones usadas por SpaceX...y un busto de bronce de él.
Boca Chica es el nombre de la playa ubicada en el condado de Cameron, Texas, que cada vez que la empresa de cohetes de Musk realiza un lanzamiento debe ser cerrada. Aunque una propuesta de ley busca cambiar eso y otorgar al también dueño de Tesla y X un mayor control sobre este lugar de recreación, según recogen medios locales.
Visto bueno de los legisladores de Texas
El control efectivo del multimillonario sobre esta playa está sujeto a un proyecto de ley introducido por un legislador republicano y que ya fue aprobado por el Senado de Texas, aunque con la oposición de 10 senadores estatales demócratas, detalla Houston Chronicle.
En este documento, se propone permitir a la futura ciudad de Starbase controlar la playa.
Starbase es una suerte de campamento levantado primordialmente para que trabajadores de SpaceX puedan realizar su vida, y que cuenta hasta con una clínica y un bar, detalla el medio local KUT NEWS, que pertenece a la cadena pública NPR. En este espacio también hay infraestructura de la empresa de Musk.
Una nota publicada por ese portal indica que será el 3 de mayo de 2025 cuando las cerca de 500 personas que habitan en la zona votarán para hacer oficial, o no, la existencia de Starbase como ciudad, bajo pedido de SpaceX. Otro detalle es que las tres personas que se perfilan para ser las autoridades de la ciudad tienen vínculos con SpaceX.
¿Qué ha dicho SpaceX?
Los intereses de la empresa de Musk con este espacio son claros. Una carta enviada por la vicepresidenta de SpaceX, Sheila McCorkle, a los legisladores texanos, considera que el proyecto es “un simple cambio administrativo” con el que el condado de Cameron, en donde se ubica este dilema, tendría el control de la playa durante los fines de semana.
Sin embargo, desde el medio Texas Tribune explican que el proyecto establece que se debe notificar a la población sobre el cierre de la playa con 48 horas de anterioridad.
Dilemas ambientales
Los inminentes cambios en la playa de Boca Chica han provocado el rechazo de organizaciones locales, que afirman que los legisladores “que se suponen nos representan, están mostrando que fueron comprados y pagados por Elon Musk y SpaceX”, como consta en un comunicado de South Texas Environmental Justice Network.
Esta no es la única causa de tensión que Elon Musk ha creado en la zona, pues en 2022 la Agencia de Protección Ambiental (EPA, en ingles) multó a SpaceX por un derrame de oxígeno líquido y el vertido de aguas de diluvio a zonas cercanas a la plataforma de lanzamiento, una acción que requiere una autorización gubernamental que la compañía no tenía en ese entonces.
Es más, cerca de donde está erguida la plataforma de lanzamiento de SpaceX, se encuentra un letrero entre la arena con el mensaje "HÁBITAT NATURAL SENSIBLE. Este no es un mirador de SpaceX".
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