Wilson y Pan Manuel son dos perros adoptados que se han convertido en los rostros de las campañas animalistas que promueven los municipios de Guayaquil y Cuenca.
Hace unos meses, Wilson, un juguetón perro, recorría las calles del puerto Santa Ana, en Guayaquil, en busca de comida y agua. Un día, llegó de forma inesperada a las instalaciones de la dirección municipal de Bienestar Animal.
Ahí le dieron comida y agua, y volvió al segundo y tercer día. Cuando los funcionarios municipales vieron que nadie lo reclamaba, decidieron adoptarlo y además le dieron una credencial que lo convirtió en el primer "servidor público canino" de Guayaquil.
Al principio, los funcionarios municipales se turnaban para llevarlo a la casa, para que no pase las noches solo en las oficinas. Hasta que una de las servidoras, Katiuska Fernández, decidió adoptarlo.
Wilson sigue acudiendo a las oficinas de Bienestar Animal y es el rostro oficial de las campañas de adopción de animales callejeros que promueve esta institución.
Wilson, el 'servidor' canino de Guayaquil, con su credencial. Cortesía.
En el Jardín Botánico de Cuenca, se pasean Pan Manuel y Bicho, dos mascotas que 'trabajan' en el área de educomunicación de la Comisión de Gestión Ambiental.
Bicho es un chihuahua que acompaña, vestido de araña, a los niños que visitan este lugar, mientras Pan Manuel se ha convertido en la estrella de los videos promocionales de la institución.
Pan Manuel fue adoptado hace siete años por una pareja de activistas y hoy es la imagen para promover la adopción, tenencia responsable de mascotas y esterilización en Cuenca.
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