El destino no es como una flecha, que viaja en línea recta directamente al blanco. Al contrario, está lleno de curvas, vericuetos e incluso cruces de caminos y desvíos. Y son esas vueltas que han permitido que el esmeraldeño Piero Hincapié sea parte de la magnífica campaña del Bayer Leverkusen, eterno mediocre de la Bundesliga que ahora enamora a todos.
Si todo sale según las proyecciones, Piero Hincapié se convertirá en el primer ecuatoriano en ganar un título de la Bundesliga. Y lo hará en un equipo que jamás ganó nada, excepto una Copa de Alemania en los años 90 y la Copa de la UEFA de la temporada 1987-1988.
Cuando se anunció que Piero Hincapié se iría al Bayer, la reacción automática fue pensar que ojalá lo hubiera contratado el Bayern, con 'n', el club de Munich que ha dominado la liga alemana a lo largo de una década.
Pero, ya que iba al Bayer (sin 'n'), anhelábamos que pudiera brillar en ese equipo mediotablero, que andaba más cerca del descenso que de la gloria, para luego ser contratado por algún clun top de Alemania o Europa.
Pero el destino quiso otra cosa. Llegó el DT Xabi Alonso, una de las estrellas de la selección de España que ganó el Mundial de 2010, y el Bayer se ha convertido en un equipo temible y admirado. Es el cuadro sensación en Europa, ¡y Piero Hincapié es parte de esta máquina de fútbol y espectáculo!
Piero Hincapié debe aprovechar al máximo este regalo del destino. Primero, porque Xabi Alonso ha resultado un sabio del fútbol y hay que aprender todo lo que pueda del míster. Pero también porque, como lo testifican los que lo conocen, Xabi Alonso es una bellísima persona. Y siempre viene bien tener a alguien así, generoso y profesional, como jefe.
Las opiniones expresadas por los columnistas de PRIMICIAS en este espacio reflejan el pensamiento de sus autores, pero no nuestra posición.
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