El ecuatoriano del Ineos Grenadiers, tercero de la clasificación general, destacó el "día nervioso" superado en la cuarta etapa de la Vuelta a España.
El carchense Richard Carapaz ya apunta a la etapa de montaña del próximo domingo, en la que "se pueden producir sorpresas" a pesar de haber sido anulada la llegada en el Tourmalet y sustituida por Formigal.
"Es una pena que no sea posible llegar al Tourmalet, pero la etapa será muy exigente con el nuevo recorrido. Hay que esperar a ver qué pasa, pero sabemos que se pueden producir sorpresas y habrá que estar atentos igualmente".
Carapaz, ganador del Giro de Italia 2019, calificó de "nervioso" la cuarta etapa, la primera que se definió en el esprint y que la ganó el irlandés Sam Bennett.
"Hemos pasado bien esta primera etapa llana sin montaña, aunque no ha sido tan fácil, ha sido un día nervioso, sobre todo al final por el viento. Se ha notado el ritmo elevado. Estoy contento, hay que seguir así".
Carapaz aseguró que se siente muy cómodo que con la camiseta de los lunares azules, como líder de la montaña, pero dejó claro que él está corriendo la Vuelta para ganarla. "Es linda la camiseta, pero nosotros tenemos un objetivo y vamos a pelear".
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