La estrella del tenis chino Peng Shuai dijo, este domingo 19 de diciembre, que nunca acusó a nadie de agredirla sexualmente y que se había malinterpretado una publicación en las redes sociales hecha a principios del mes pasado.
El bienestar de Peng Shuai se convirtió en un motivo de preocupación entre la comunidad mundial del tenis y los grupos de derechos cuando pareció alegar que un exviceprimer ministro chino Zhang Gaoli la había agredido sexualmente en el pasado. Después de esa publicación, estuvo ausente de la vista del público durante casi tres semanas.
"Primero, necesito enfatizar un punto que es extremadamente importante, nunca he dicho o escrito que alguien me haya agredido sexualmente, tengo que enfatizar claramente este punto", dijo Peng en el video publicado por Lianhe Zaobao, un medio de comunicación de Singapur.
Los comentarios de Peng, este domingo, marcaron la primera vez que abordó el asunto frente a una cámara en público.
Dijo que su publicación en Weibo, un sitio de redes sociales similar a Twitter, que se había eliminado rápidamente, era un "asunto privado".
Peng Shuai, de 35 años, dijo en el video que "hubo muchos malentendidos" sobre su publicación en Weibo, sin dar más detalles y sostuvo que había estado viviendo en su casa en Pekín sin supervisión. En ningún momento mencionó a Zhang.
Reuters no ha podido comunicarse con Peng desde su publicación en Weibo.
A principios de este mes, la WTA, que ha buscado una línea directa de comunicación con Peng, dijo que iba a suspender los torneos en China debido a las preocupaciones sobre el tratamiento de Peng y la seguridad de otros jugadores. La entidad no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios el domingo.
China no ha comentado directamente sobre la publicación inicial de Peng, pero dijo después de la decisión de la WTA de suspender los torneos que "se opone a la politización de los deportes". Zhang no se ha pronunciado al respecto.
Peng Shuai dijo en el video publicado este domingo que había escrito personalmente una carta el mes pasado al director de la WTA, Steve Simon, en la que negó la acusación de agresión, y que una traducción al inglés de la misma por los medios estatales chinos era precisa.
Simon había dicho en ese momento que "le costaba creer" que Peng realmente había escrito el correo electrónico o creía lo que se le había atribuido.
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