El británico Simon Yates (MTS), con un impresionante arranque a cuatro kilómetros de la meta, en plena ascensión, ganó la etapa, entre Nursia y Sassotetto, de 202 km y registró un tiempo de cinco horas, 30 minutos y 42 segundos.
La etapa más larga de la carrera cumplió a lo esperado, que no era otra cosa que los favoritos se jugaran el triunfo parcial y el liderato en la ascensión a Sassotetto, con la meta en la cima y donde es 2018 se impuso el español Mikel Landa.
Y así aconteció, se formó un grupo de diez ciclistas, entre ellos el español Héctor Carretero (Movistar) y el colombiano Jhonatan Restrepo (Androni), que llegaron a contar con más de seis minutos de ventaja, lo que hacía líder virtual de la prueba al italiano Giovanni Visconti (Vini Zabu).
Ya con un pelotón diezmado, pero con los favoritos para la general agrupados, la batalla la inició Yates, a tres segundos del líder en la clasificación general, con un potente ataque a cuatro km, al que pudo seguir Majka, Fausto Masnada, Geraint Thomas y Aleksandr Vlasok.
Sin embargo, el empuje de Yates y de Majka (a nueve segundos en la general del líder), que veía el momento oportuno para desbancar a Woods, hizo que poco a poco este perdiese ya más de un minuto, a 3 km de meta.
Para Yates es su primera victoria de etapa en este atípico 2020 y, además, une el premio de ser la nueva maglia de líder de la Tirreno-Adriático, con una ventaja de 16 segundos sobre Majka y de 39 segundos sobre Thomas.
Por su parte, el ecuatoriano Jonathan Caicedo, del EF Pro Cycling llegó en el puesto 91, a 19 minutos y 30 segundos del líder. En la general, Caicedo bajó 10 puestos y se ubica en la posición 53, a 28:57 del líder.
El sábado se disputará la sexta etapa, entre Castelfidardo y Senigallia, de 171 km.
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