El club catalán está muy cerca de anunciar un acuerdo con Spotify por el patrocinio en la parte frontal de las camisetas del primer equipo masculino y el femenino, las camisetas de entrenamiento y los derechos de nombre del estadio Camp Nou hasta el 2025, según han informado las fuentes de la negociación a la agencia Efe.
La primera oferta de Spotify que recibió el FC Barcelona fue significativamente inferior a los USD 68 millones y tan solo estimaba aparecer en la camiseta del primer equipo masculino, una cantidad que se consideró insuficiente. Así, la solución que se encontró para incrementar el precio fue incluir otros activos.
Uno de ellos han sido los derechos de nombre del Camp Nou, que el club pretende ceder a Spotify por un plazo de tres años, los que, según las previsiones, faltan para que esté finalizada la remodelación del estadio azulgrana. De esta manera, en 2025, el FC Barcelona podría buscar con el proyecto terminado una oferta mejor para este activo.
Sin embargo, el acuerdo con Spotify ha terminado definitivamente las relaciones entre el presidente Joan Laporta y el director general Ferran Reverter, quien ha dimitido este martes 8 de febrero.
La confianza entre ambos estaba deteriorada hace meses a causa de las discusiones en algunas decisiones de club. Además, Laporta ha sido quien ha llevado la delantera en el acuerdo con la marca sueca, haciendo algunas elecciones que han disgustado a Reverter.
El acuerdo con Spotify solucionará uno de los grandes dolores de cabeza que tenía el FC Barcelona, ya que había una ausencia para un patrocinador en la parte frontal de la camiseta, una vez se supo que Rakuten no alargaría su vinculación más allá del 30 de junio de 2022.
El próximo reto en el ámbito de los patrocinios será encontrar una marca para la manga izquierda de la camiseta de juego, que está libre después de que Beko renunciara a este activo el pasado verano, y por el que pagaba USD 10 millones.
Las ofertas más interesantes económicamente han llegado procedentes de empresas de criptomonedas, un sector con una gran capacidad de inversión. Pero la junta de Laporta duda de relacionarse con un sector que considera poco ético y que no va en consonancia con los valores del club azulgrana.
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