El presidente Guillermo Lasso reiteró su apoyo al trabajo de la Policía y las Fuerzas Armadas en su lucha contra la delincuencia. Ofreció mejorar a estas dos instituciones.
El Presidente de la República, Guillermo Lasso, mantuvo la tarde del 20 de octubre de 2021 un encuentro con los policías del Regimiento Quito, donde recordó la tarea de los uniformados de defender a la ciudadanía frente a la inseguridad y al narcotráfico.
El Presidente reiteró, como lo hizo la noche que anunció el estado de excepción, el respaldo de su gobierno a los uniformados y a su accionar frente a la inseguridad, “el presidente estará siempre del lado de la Policía”.
Tras lo cual recordó que el enemigo común del país en estos momentos es el narcotráfico. “Esta amenaza externa quiere convertir a todo el Ecuador su territorio. No lo vamos a permitir”, insistió el Presidente.
La comandante de la Policía, Tannya Varela, afirmó que los 52.000 servidores policiales tienen la tarea de combatir, con firmeza, la delincuencia. “Hoy podemos decir que este no solo es un país del encuentro, sino un país unido para luchar por esa paz que anhelamos”, afirmó Varela.
Lasso insistió en que la ciudadanía ya no necesita movilizaciones, sino paz, oportunidades y trabajo.
“La ciudadanía necesita alegría y no miedo de que mañana incendien otro edifico público como ya sucedió hace dos años en Quito”
Guillermo Lasso, presidente de la República
Lasso aseguró que no se repetirá otro octubre de 2019 y afirmó que tanto la Policía, las Fuerzas Armadas y la ciudadanía defenderán a Quito ante los supuestos intentos de “desestabilización política”.
Estas declaraciones ocurrían mientras sindicalistas, indígenas y grupos sociales anuncian nuevas movilizaciones contra el Gobierno y exigen que se congele el precio de los combustibles: gasolinas de bajo octanaje y diésel.
Fortalecer el trabajo de Fuerzas Armadas
En la mañana, durante un encuentro con organizaciones sociales, el Presidente aprovechó para respaldar el trabajo de las Fuerzas Armadas y dijo que en los últimos 14 años, de manera deliberada, se pretendió debilitarlas reduciendo el número de efectivos e inmovilizándolas “con equipos que no han funcionado al nivel máximo”.
“Nuestro Gobierno va a recuperar la fortaleza de las Fuerzas Armadas y vamos a convocar a los jóvenes ecuatorianos para que participen de la instrucción militar”, dijo Lasso.
Una de las primeras acciones para afianzar el trabajo de las Fuerzas Armadas fue a través de la designación del nuevo ministro de Defensa, Luis Hernández, que reemplazó a Fernando Donoso, quien estuvo en el cargo desde el 24 de mayo.
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