La administración de Rodas firmó un contrato complementario por USD 5 millones con el Consorcio GMQ, que es investigado por el pago de sobornos.
Sigue la controversia por el supuesto pago de USD 1,2 millones en sobornos, por parte del consorcio español GMQ, con el objeto de quedarse con un millonario contrato de consultoría para la gerencia del Metro de Quito.
Ese contrato fue firmado en 2013 por USD 15 millones, pero documentos analizados por PRIMICIAS en el portal del Servicio Nacional de Contratación Pública (Sercop) muestran que hubo un contrato complementario.
Este segundo contrato se firmó por USD 5 millones, el 16 de noviembre de 2015, cuando Mauricio Anderson era gerente de la empresa Metro de Quito.
Para esa fecha, el alcalde de Quito era Mauricio Rodas.
Según los documentos del Sercop, el contrato complementario nació de la necesidad de hacer "ajustes, reformas o modificaciones a los diseños de ingeniería en las obras de construcción de la Línea 1 del Metro de Quito".
El objeto del contrato era encargar los estudios de optimización de diseños de ingeniería, para bajar los costos de la segunda fase de la construcción de la obra.
Rodas se deslinda del escándalo
El exalcalde, Mauricio Rodas, y el gerente del Metro, Mauricio Anderson, se deslindan de cualquier responsabilidad.
Rodas dijo a PRIMICIAS que la denuncia que hizo la Fiscalía Anticorrupción de España apunta únicamente al contrato firmado en 2013, "cuando yo no era alcalde de Quito".
Agrega que, por lo mismo, no conoce detalles de esta trama.
Sobre el contrato complementario de 2015, cuando ya ejercía el cargo, Rodas señala que la firma fue "una tarea específica de la Empresa Metro de Quito, pues es la administradora de los convenios que se firman para la construcción".
Rodas asegura que los contratos que el Metro celebró durante su administración tuvieron la aprobación de los organismos multilaterales de crédito, que prestaron parte del dinero para la construcción.
Anderson coincide con Rodas en que las primeras investigaciones solo hacen referencia al contrato firmado en 2013 y "no hay ninguna mención al contrato complementario".
"Hay que entender que los dos contratos fueron firmados en dos momentos y circunstancias diferentes. Cuando yo estuve a cargo del Metro se firmó un contrato de USD 5 millones. El contrato de USD 15 millones se firmó en 2013 y a ese apuntan las investigaciones", explica.
Agrega que el contrato complementario tuvo como objetivo optimizar los contratos originales que se hicieron para la construcción del metro.
"Los nuevos diseños permitieron que el Municipio y los organismos multilaterales ahorren cerca de USD 120 millones sin disminuir la calidad de la obra", dice.
E insiste en que la firma del contrato complementario tuvo la aprobación de la Alcaldía y de los bancos que prestaron dinero para la construcción de la obra.
Contrato para los mismos
El contrato complementario se adjudicó al Consorcio GMQ, el mismo que había firmado el primer contrato.
Según Jorge Yáñez, gerente de Infraestructura del Metro de Quito de esa época, el consorcio GMQ tenía "experiencia y vasta experticia".
Yáñez fue, además, gerente general del Metro en 2018.
Para entregar el contrato complementario al mismo consorcio, el Metro de Quito se valió del artículo 85 de la Ley Nacional de Contratación Pública.
El artículo dice que "en caso de que fuere necesario ampliar, modificar o complementar una obra o servicio determinado por causas imprevistas o técnicas, debidamente motivadas, presentadas con su ejecución, el Estado o la entidad contratante podrá celebrar con el mismo contratista, sin licitación o concurso, contratos complementarios que requiera la atención de las modificaciones antedichas, siempre que se mantengan los precios de los rubros del contrato original, reajustados a la fecha de celebración del respectivo contrato complementario".
La empresa Metro de Quito justificó el pago de los USD 5 millones, alegando que la ley permite la firma de un contrato complementario.
Esto siempre que el valor del contrato complementario no exceda el 70% del valor del contrato original, que en este caso era de USD 15 millones.
¿Qué dice el contrato complementario?
El contrato complementario estipulaba que el Consorcio GMQ debía elaborar tres productos en un plazo de 215 días.
- Para la entrega del primer producto había plazo de 45 días, a un costo de USD 580.125. En ese tiempo, el consorcio realizó los diseños de túneles, trazados viales y de las estructuras de las estaciones San Francisco y La Alameda.
- En el segundo producto elaboró diseños de 10 estaciones, además de planos relacionados con trazados viales y túneles. El costo de este producto fue de USD 1,8 millones y el plazo de entrega era de 90 días.
- Para el tercer producto, el Metro pagó USD 1,9 millones por diseños de ingeniería de toda la Primera Línea del Metro. Para culminar este trabajo, el consorcio tuvo un plazo de 215 días.
Quito Honesto anuncia investigaciones
La Comisión Metropolitana de Lucha Contra la Corrupción Quito Honesto anunció que ha iniciado investigaciones sobre el supuesto pago de sobornos por parte de GMQ.
Y dice que "recomendó al alcalde Santiago Guarderas la presentación de una denuncia ante la Fiscalía para dar inicio a un proceso de indagación previa".
Guarderas aseguró a PRIMICIAS que apoyará a las autoridades judiciales para encontrar a los responsables.
Quito Honesto, además, anunció que tomó otras cuatro acciones:
- Pidió que la Cancillería haga gestiones para contar con asistencia penal internacional que permita recoger información sobre la investigación que lleva a cabo la Fiscalía española.
- Solicitó a la Superintendencia de Compañías información de las empresas que conforman el consorcio GMQ: Prointec y KV Consultores, además de Bustren.
- Pidió que el Metro de Quito entregue toda la documentación que tenga que ver con los contratos con el Consorcio GMQ.
- Requirió al Sercop la documentación de todos los procesos precontractuales, que hizo el Metro de Quito en 2013.
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