De los 53.847 embarazos, 3.386 fueron de niñas de 10 a 14 años, mientras que los 50.461 restantes se identificaron en adolescentes de 15 a 19 años.
Sentada en la sala de Consulta Externa de la Maternidad Isidro Ayora, de Quito, María juega con su pequeña hija de ocho meses. Con una sonrisa tímida, recuerda que quedó embarazada sin planificarlo cuando apenas tenía 17 años.
"El embarazo y los primeros meses de maternidad fueron difíciles. Tuve dolores muy fuertes y muchas personas me juzgaron por ser una madre joven", agrega.
Mientras espera el llamado del médico para el control mensual de su bebé, María reconoce que ser madre no es fácil y menos a su edad. "No sabía cómo cuidar a mi hija. Mi mamá y mi suegra me ayudaron en los primeros meses porque tenía miedo de causarle algún daño", dice.
El caso de María es solo uno de los 53.847 embarazos en niñas y adolescentes que registró el Ministerio de Salud en 2022.
De esos 53.847 embarazos, 3.386 fueron de niñas de 10 a 14 años, mientras que los 50.461 restantes se identificaron en adolescentes de 15 a 19 años.
El ministro de Salud, José Ruales, califica al embarazo en niñas y adolescente como un grave problema para el país, tomando en cuenta que ellas deben dejar de lado actividades propias de su edad para dedicarse a ser madres.
Además, recuerda que el Código Integral Penal (COIP) señala que cualquier relación sexual con una niña menor de 14 años es considerada una violación, cuya pena puede llegar a los 22 años de prisión.
No todos nacen
Si bien el número de niñas y adolescentes embarazadas en Ecuador es alarmante, hay otra cifra que también genera preocupación: los embarazos interrumpidos por las complicaciones obstétricas.
Según el Ministerio de Salud, de los 53.847 embarazos registrados en 2022, 13.926 presentaron problemas que impidieron que los niños nazcan.
La entidad detalla que entre las complicaciones más comunes están:
- Hemorragias
- Abortos naturales
- Infecciones
- Preeclamsia
Para evitar que más niñas y adolescentes presenten problemas durante el embarazo, el Ministerio de Salud publicó la ‘Normativa para la atención del embarazo’ y la ‘Normativa para la prevención y detección de violencia en niñas y adolescentes’, con las que busca reducir los riesgos durante el período de embarazo.
El ministro Ruales detalló que esas normativas proporcionan directrices a los profesionales de la salud para la prevención y detección de casos de presunta violencia física, psicológica y sexual.
Con relación a las tasas de nacimiento, el Ministerio de Salud contabiliza dos nacimientos por cada 1.000 niñas de 10 a 14 años. Mientras que en las adolescentes, de entre 15 y 19 años, la cifra se incrementa hasta 54,6 nacimientos.
El objetivo del Plan Decenal de Salud 2022-2031 es reducir a 0,52 nacimientos por cada 1.000 niñas de 10 a 14 años y a 16,9 nacimientos en las adolescentes de 15 a 19 años.
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