Fidel Valarezo ha sido definido como un 'héroe sin capa' por usuarios en redes sociales, luego de embestir por tres veces a un ladrón a bordo de una moto en Guayaquil.
Cuando Fidel Valarezo, de 50 años, embistió a un presunto ladrón en Urdesa, norte de Guayaquil, solo pensaba "que podía ser mi mamá y tenía que actuar".
Valarezo transitaba por una calle de la ciudad cuando notó que un hombre, a bordo de una moto, le había robado las pertenencias a una mujer en la calle, el pasado 30 de junio.
Se trataba de una enfermera que había cobrado su sueldo ese viernes, y corría el riesgo de perderlo todo.
Quiteño y residente en Guayaquil desde hace 17 años, Valarezo cuenta que no dudó dos veces en utilizar su camioneta color blanca para embestir al presunto delincuente por tres ocasiones.
"No quería atropellarlo, sino asustarlo y si en su casa no le han enseñado a no robar, pues espero que ya le enseñé", agrega este especialista en veterinaria sobre el presunto ladrón.
El hecho quedó registrado por una cámara de videoseguridad y ha sido viralizado en redes sociales, donde han calificado a Valarezo como un 'héroe sin capa'.
"No creo que sea un héroe, sino un hombre común, cansado de que unos cuantos nos atemoricen".
Fidel Valarezo, quiteño, radicado en Guayaquil.
Para este hombre, la sociedad en Guayaquil vive con miedo de salir, de caminar por las calles o de ir al parque.
Precisamente, la actuación de Valarezo ocurre en momento en que la ciudad afronta un incremento de asaltos y muertes violentas, que ha llevado al Gobierno a imponer repetidos estados de excepción.
Guayaquil, junto a Samborondón y Durán, integran el llamado distrito policial Zona 8, y en lo que va de año, suman más de 1.250 asesinatos.
"Hay que vencer el miedo, porque muchas personas veían el robo desde las ventanas de sus casas y no hicieron nada", agrega Valarezo.
Lluvia de ofertas
Tras lo ocurrido, el ciudadano pidió colaboraciones en redes sociales para reparar el auto, y señala que le han "llegado ofertas de todo tipo".
"Hay gente que me invita a comer, a la playa o que me ofrece hasta un 'six pack' de cervezas", dice Valarezo, entre risas.
Una de las ofertas provino del abogado, Lenin Duque, quien se comprometió a ayudarlo con la reparación de la camioneta.
Duque no quiso revelar el monto de los arreglos mecánicos, pero indicó que era necesario hacerlo porque Valarezo arriesgó su vida.
"Llegué hacia él porque me solidaricé con lo que ocurrió con el auto, que evidentemente se dañó producto del choque", dice el abogado Duque.
Por otra parte, señala que hasta el momento el presunto ladrón, involucrado en el incidente, no ha interpuesto ninguna demanda o acusación en contra de Valarezo. "No hay ninguna situación legal en su contra", reitera Duque.
Un hecho similar, de la llamada 'justicia por mano propia', ocurrió también en Quito el 18 de junio, cuando vecinos del barrio del Comité del Pueblo lanzaron bombas molotov a un inmueble utilizado para el microtráfico de drogas.
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