Un ataque armado en las calles Gómez Rendón y la 14, en Guayaquil, dejó un saldo de 10 muertos y 5 heridos. Otros 4 murieron en un ataque en Atacames.
Con estupor y desconcierto. Así amanecieron Guayaquil y Atacames luego de las masacres registradas en la noche del 29 de abril, en pleno estado de excepción. La Policía atribuye estas muertas a la guerra entre grupos criminales. Hasta las 17:00 del 30 de abril, no se informó de detenciones por estos casos.
En Guayaquil, a las 20:40, un grupo armado arremetió en contra de personas que tomaban en las afueras de una mecánica, en las calles Gómez Rendón y la 14, suburbio del Puerto Principal. Al parecer, los agresores portaban fusiles y atacaron sin contenerse, al punto que también impactaron a transeúntes que pasaban por el lugar.
Las cifras oficiales que se manejan son que el ataque dejó 10 muertos y 2 heridos. El comandante de la Zona 8, Willian Villarroel, afirmó este 30 de abril, que cinco de los fallecidos registran antecedentes penales. Una de las víctimas registra seis detenciones, todas por robo.
Entre los heridos está una niña de 5 años. La menor será operada al haber sido afectadas por las esquirlas.
El representante de la Policía Nacional afirmó que busca a los autores de estos asesinatos, que ocurrieron pese a las medidas del Gobierno en contra de la delincuencia. Este crimen múltiple forma parte de los enfrentamiento entre bandas criminales por el control de Guayaquil. El comandante Villarroel no identificó a los grupos.
La Fiscalía expresó este 30 de abril que abrió de oficio la investigación. Sus agentes ya recabaron pistas e incluso tienen en su poder un fusil usado en este ataque.
Ataques en Esmeraldas
Mientras tanto, el 29 de abril también se registró un ataque armado en el barrio Nueva Esperanza de Atacames, en la parte conocida como La Trece, a la medianoche. No obstante, se siguió el mismo patrón: un grupo fuertemente armado irrumpió en un local de diversión nocturna y disparó a los asistentes.
La Policía sospecha que esta agresión es parte de la disputa territorial entre las bandas Los Gansters y Los Tiguerones.
Este ataque dejó 4 muertos y otros 4 heridos, uno de ellos menor de edad, según informó a PRIMICIAS el general Fausto Buenaño, comandante de la Policía en Esmeraldas.
La fuerza pública se hizo presente y debió controlar a los vecinos del lugar, que estaban exaltados por el miedo.
En esa misma localidad hubo otro asesinato nocturno. El ciudadano Pablo Cañola Salazar, de 22 años, fue acribillado por sicarios cuando llegaba a su domicilio.
Además, desconocidos dispararon contra la vivienda del exalcalde de Esmeraldas, Ernesto Estupiñán, ubicada en el centro de la capital provincial.
Jornadas violentas
Estos crímenes ocurren un día después de que, en el suburbio de Guayaquil, en la intersección de las calles 33 y Capitán Nájera, un sicario acabó con la vida de una persona. La víctima tenía antecedentes por narcotráfico.
Asimismo, en Pascuales, se registró una balacera durante un enfrentamiento entre pandillas. No hubo reportes de heridos.
Noticia publicada originalmente a las 06:00 del 30 de abril. Actualizada a las 17:00 del 30 de mayo con declaraciones de la Policía Nacional.
Lo último