Al presidente electo de Colombia hay que darle el beneficio de la duda. Confiar en que Petro será un buen gobernante, austero, eficiente y tolerante, pero los antecedentes juegan en su contra.
Su pasado como guerrillero, su acertado paso por el Senado y su penosa administración al frente de Bogotá, la capital colombiana, dejan la pregunta de ¿Cuál será el perfil que saldrá a flote? Jorge Ortiz nos cuenta los detalles de la trayectoria de esta incógnita llamada Gustavo Petro.
Las opiniones expresadas por los columnistas de PRIMICIAS en este espacio reflejan el pensamiento de sus autores, pero no nuestra posición.
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