El nuevo alcalde de Cuenca, Cristian Zamora, recibirá una ciudad movilizada por la creciente inseguridad, casi aislada por los problemas viales y con importantes desafíos por su acelerado crecimiento.

En lo político, el gran desafío de Zamora será alcanzar gobernabilidad, tras haber ganado las elecciones con el 18% de los votos. 

Entre sus principales propuestas de campaña está el retiro de los radares instalados por la anterior administración. Algo que, sin embargo, no es tan sencillo porque puede derivar en una millonaria demanda contra el Municipio de Cuenca.