Los habitantes del Centro Histórico de Quito enfrentan una aguda crisis a causa de la pandemia, la inseguridad y el desorden que generan, sobre todo, las ventas informales.

En un recorrido, las cámaras de PRIMICIAS pudieron constatar que, además, en esta zona emblemática de la capital decenas de locales han cerrado sus puertas. Muchos comerciantes aseguran que han perdido entre el 60% y el 80% de sus clientes. Y a esto se suma la proliferación de vendedores ambulantes y la inseguridad.