El 30 de marzo de 2020, Gabriela Orellana perdió a su esposo, quien falleció después de sufrir complicaciones respiratorias a causa de Covid-19. Él tenía 41 años, era taxista por lo que su esposa supone que fue en su trabajo donde contrajo el virus. Él no pertenecía a los grupos de personas considerados vulnerables ya que no padecía de enfermedades crónicas preexistentes.

Orellana decidió contar a PRIMICIAS su historia para evitar que más personas sigan perdiendo a sus seres queridos. Y también porque, ella y sus hijos aún no han podido realizarse la prueba que les permita conocer si también están contagiados por Covid-19.