Para expiar sus pecados o probar adrenalina, decenas de personas se azotan con el viril de toro en San Juan de Oriente, al sur de Nicaragua. Esta polémica tradición religiosa tiene más de cuatro siglos de antigüedad en conmemoración del día de San Juan Bautista.
El ritual se conoce como baile de los “chinegros”. Dos personas se golpean con un látigo, mientras decenas de individuos miran el combate y bailan en los exteriores de la iglesia local.
Toda esta celebración, según los asistentes, se realiza con profunda devoción cristiana, pues el objetivo del castigo es redimir sus pecados.
