La cineasta ecuatoriana y su nuevo documental -todavía en desarrollo- forman parte de Berlinale Talents, que se realiza esta semana, como parte del Festival.
Se llama El movimiento de las cosas y, como proyecto documental, busca reflejar otra manera en la que la reconocida cineasta Alexandra Cuesta puede usar el formato.
Su obra se ha movido entre lo experimental y el cine de vanguardia. Con mucho acierto. Pero hoy existe una historia que ella quiere contar en un sentido más "tradicional". Si bien el proyecto está en desarrollo, Cuesta sabe que no se trata de romper con lo que ha hecho antes.
Es probable que el tema pase por encontrar esa la manera de congeniar una forma de mirar y mostrar el mundo -el estilo que ella tiene- con la historia que los personajes reales tienen para contar.
Porque en El movimiento de las cosas hay un lugar y su gente. Un pueblo pequeño, la parroquia Susudel, del cantón Oña, en la provincia del Azuay. Lugar que parece destinado a desaparecer, como muchos pueblos en esta parte del planeta.
¿Lo particular aquí? Que Cuesta contrapone las miradas de dos mujeres. Luz es la más grande, tiene 83 años, vive sola, se levanta a trabajar el campo todas las mañanas y se mantiene firme en la memoria de otros tiempos. Nataly es mucho más joven y quiere irse del poblado, a buscar otros espacios, a cumplir sueños.
Es una historia de generaciones que se encuentran, sí. Pero siempre hay algo más, como la directora lo explica en el siguiente video:
El proyecto como parte de un laboratorio en Berlinale Talents
Alexandra Cuesta dice que hacer cine toma tiempo, mucho tiempo. Es algo que todo el mundo que está metido en el medio lo sabe.
Y en ese tiempo, las ideas se desarrollan a su propio ritmo. Muchas veces porque hay algo de financiamiento que debe resolverse -casi siempre-. En el fondo, al ser un trabajo colectivo, el tiempo que toma hacer una película es también el tiempo para llegar a acuerdos.
De escuchar y de decidir.
El movimiento de las cosas debió rodarse en 2020. Pero, la pandemia cambio el plan original.
Lo cual vino con una ventaja: la posibilidad de que ella y el proyecto sean seleccionadas para el 'Doc Station Project Lab', de Berlinale Talents 2021. Este encuentro que se da a la par que el reconocido Festival de Cine de Berlín, se realiza esta semana, hasta el viernes 5 de marzo.
Cuesta participa en las sesiones que son en línea, en las que comparte con otros realizadores y tutores en diversas áreas. No está en Berlín por las circunstancias, pero está presente desde Quito. Debe levantarse en la madrugada para participar en las actividades.
Es lo que es. Es una oportunidad. Especialmente porque al hablar del proyecto y al escuchar a otras personas reflexionar sobre lo que ella busca, el documental va a crecer, irremediablemente.
El cine es colectivo, en definitiva.
Para ella, ser parte de esto es un honor y aquí explica cómo funciona.
La importancia de la participación
Este jueves 4 de marzo, Alexandra Cuesta deberá exponer su proyecto. Casi como un 'pitch', ese proceso por el cual productores y realizadores cinematográficos exponen sus ideas para conseguir fondos.
Pero, en lugar de dinero, se trata de contactos.
Hay un objetivo ahí, pero Cuesta no se queda solo en eso. Ella asume cómo este proceso le ha dado una nueva vida al proyecto documental. Casi como si le pudiese devolver el valor que quizás, por la época, se estaba quedando a un lado.
El movimiento de las cosas es un largometraje de Alexandra Cuesta, producido por La República Invisible. La realizadora espera rodarlo este 2021.
Cuesta ha trabajado en filmes como Despedida (2013), Territorio (2016), Notes, Imprints (On Love): Part I y Notes, Imprints (On Love): Part II (2020), entre otros. Además ha presentado su trabajo en el New York Film Festival, Cinema Du Reel, BFI Film Festival, BAFICI y en el Image Forum Tokyo.
El 2018 ella recibió una beca Guggenheim por cine y video.
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