Francisco Egas, presidente de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF), desistió este martes 12 de mayo de una "acción de protección", acción legal que presentó el 1 de mayo contra el Directorio del organismo, que lo removió el 24 de abril, cuando designó en su lugar a Jaime Estrada.
"Es mi voluntad, al amparo de lo dispuesto en el artículo 15.1 de la Ley Orgánica de Garantías Jurisdiccionales y Control Constitucional, desistir de la presente demanda de acción de protección", según el oficio de una Unidad Judicial de Quito, donde se sigue la causa.
Egas recurrió a la acción de protección para impedir la realización del Congreso Extraordinario de la FEF que solicitaron clubes y asociaciones y que se efectuó el pasado 1 de mayo, de manera virtual, por el estado de excepción decretado en Ecuador por la pandemia del Covid-19.
"En virtud de que se ha solicitado el desestimiento de la presente acción de protección, se deja sin efecto la convocatoria a audiencia (para mañana miércoles 13 de mayo) realizada mediante auto de fecha 1 de Mayo del 2020", añade la resolución de la Unidad Judicial.
Después del Congreso Extraordinario de la FEF, en el que la mayoría de clubes y asociaciones del fútbol profesional conocieron los motivos por los que el Directorio removió a Egas, sus directivos ratificaron la decisión y a Estrada como presidente de la Federación.
Por su parte, Estrada publicó en su cuenta de Twitter el pasado 7 de mayo un menaje en el que aseguraba que la mayoría del Directorio había presentado "una denuncia (ante FIFA y Conmebol) contra el señor Egas por presunta infracción a los Estatutos" y normas nacionales e internacionales, al acudir a la justicia ordinaria" para que interviniera en la pugna.
Si bien el Congreso Extraordinario se realizó con la presencia de 15 de los 26 clubes del fútbol nacional, y 16 de las 22 asociaciones, los organismos internacionales señalaron un día antes que "ni la FIFA ni la Conmebol darán validez a decisiones que se adopten en los diferentes órganos de gobierno de la FEF, incluido su Congreso".
La polémica por la presidencia de la FEF está en manos de la FIFA y la Conmebol, a pesar que el viernes 8 de mayo, 14 clubes y 14 asociaciones instaron a Egas a que renuncie, basados en un enunciado de manera pública que hizo el directivo, en el sentido de que si la mayoría le pedía la renunciara, él se iba a su casa.
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