Nadie sabe dónde está el presunto agresor. El Ministerio de Educación asegura que la víctima recibió atención inmediata por las autoridades del colegio.
El hecho habría ocurrido el jueves 21 de abril de 2022. Una estudiante denunció que fue agredida sexualmente por el conductor de una unidad de transporte escolar de un colegio ubicado en el norte de Quito.
La madre de la víctima asegura que los exámenes médicos practicados a su hija evidencian restos de escopolamina y signos de abuso sexual.
Además, ella sostiene, con indignación, que las autoridades del colegio le dijeron que la estudiante ingirió alcohol y que habría pedido que la saquen a escondidas de la institución.
En una rueda de prensa realizada el 25 de abril de 2022, cuatro días después de que se habría cometido el presunto delito, el Ministerio de Educación se pronunció.
Diana Castellanos, Subsecretaria para la Innovación Educativa y el Buen Vivir, informó que el caso ya está siendo investigado por la Fiscalía.
"El 21 de abril, la estudiante y el grupo de alumnos acudieron a contar los hechos en el Departamento de Consejería Estudiantil. Inmediatamente, las autoridades del colegio llamaron al ECU 911 para denunciar el presunto delito, y llamaron a la madre de la chica", agregó.
Tras conocer lo ocurrido, "los padres de familia y la Policía se dirigieron a la Fiscalía para poner la denuncia, mientras que el Ministerio de Educación puso otra denuncia al día siguiente", detalló.
Castellanos aseguró que, tras conocer el hecho, el colegio activó los protocolos frente a situaciones de violencia detectadas o cometidas en el sistema educativo.
El coordinador jurídico del Ministerio, Roberto Acosta, reconoció que la entidad desconoce el paradero del presunto agresor.
Sobre las acciones legales que la entidad sigue, Acosta explicó que hay dos vías que están abiertas: la administrativa y la jurídica.
Sobre la primera dijo que el Ministerio está buscando la forma de aplicar una sanción a la cooperativa de transporte y al conductor, pues este último no tiene una relación directa con la entidad.
Mientras que el Ministerio interpuso una demanda en la Fiscalía.
"La Fiscalía también determinará si la estudiante fue escopolaminada", adelantó.
Atención médica y psicológica
La estudiante, que habría sido violentada sexualmente, recibe atención psicológica por parte del Ministerio de Educación.
Así lo aseguró la subsecretaria Castellanos, quien dijo que el grupo de estudiantes que acompañó la víctima a denunciar el hecho también recibe terapia psicológica.
"Este tipo de casos requieren un acompañamiento largo, por lo que serán derivados al Ministerio de Salud", dijo.
Se tiene previsto que el 26 de abril de 2022, los padres de la estudiante y las autoridades del Ministerio mantengan una reunión para conocer más detalles del caso y proporcionar información a la Fiscalía.
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