Desde el 11 de abril, la Secretaria de Movilidad y la Agencia Metropolitana de Tránsito (AMT), autorizaron al transporte público y a los autos particulares, utilizar de forma controlada los carriles exclusivos del Trolebús y la Ecovía, en cuatro puntos clave de Quito.

Según Cecilia Vivanco, coordinadora de Operaciones de la AMT, el objetivo es reducir al menos en un 25% la carga vehicular en las horas pico y bajar los tiempos de traslado de los buses articulados.

Esta iniciativa ha sido cuestionada por expertos en movilidad, exfuncionarios del Municipio y algunos concejales, quienes aseguran que se está violando la normativa municipal.