En medio de la incertidumbre, por el juicio político contra el Presidente, el Gobierno tiene previsto presentar una reforma tributaria para dar alivios en el pago del Impuesto a la Renta.
El desempeño de la economía de Ecuador en los próximos trimestres dependerá del resultado del juicio político que lleva adelante la Asamblea Nacional contra el presidente Guillermo Lasso, según Citi Research, parte de la multinacional de servicios financieros Citi.
Por ahora, el centro de investigación mantiene en 1,5% la proyección de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) para 2023. Pero el juicio político genera incertidumbre porque tiene varios posibles finales.
Uno de ellos es la destitución de Lasso, quien ha anticipado que aplicaría la muerte cruzada para disolver la Asamblea y gobernar por decreto hasta que se realicen nuevas elecciones.
Ese escenario preocupa a los mercados porque puede desembocar en manifestaciones sociales.
La incertidumbre política hace que el horizonte para la inversión sea poco claro, generando menos empleo, lo que ahonda la impopularidad del Gobierno
Iván Stambulsky, Citi Research
En eso coincide el centro brasileño de estudios económicos Fundación Getulio Vargas (FGV). En su último informe sostiene que el deterioro del ambiente político en Ecuador ha impactado los pronósticos para el PIB en 2023.
Este 9 de mayo de 2023, el Pleno de la Asamblea Nacional resolvió llamar a juicio político al presidente Lasso. Lo hizo con 88 votos a favor.
Ahora, el presidente de la Asamblea, Virgilio Saquicela, deberá fijar la fecha para el proceso.
Choques externos
Además, la incertidumbre sobre el desempeño de la economía de Ecuador, al igual que la del resto de Latinoamérica, se debe a una serie de choques externos que se presentan en 2023 y que se podrían mantener en 2024.
Esto son:
- Desaceleración de China, una de las economías más grandes del mundo y uno de los principales destinos de las exportaciones de Latinoamérica.
- Debido a la ralentización de la economía china, los precios de las materias primas podrían moderarse o caer, después de su alza en 2022. Por ejemplo, se prevé que el precio del petróleo, principal producto de exportación de Ecuador, baje un 15% en 2023.
- Aumento de las tasas de interés en Estados Unidos, que se encuentran entre 5% y 5,25%, para controlar la inflación que se mantiene elevada en ese país. La medida encarece el financiamiento para Latinoamérica y puede producir una fuga de inversionistas que buscan resguardar sus capitales en activos seguros como los bonos del Tesoro de Estados Unidos.
Todo eso hace que "Latinoamérica tenga una desaceleración más profunda en comparación con otras regiones", sostiene Ernesto Revilla, economista en jefe de Citi para la América Latina.
Esta región crecerá 0,5% en 2023, lo que contrasta con la proyección de 2,4% para la economía mundial.
Reforma tributaria
Citi Research también se pronunció sobre el impacto de ciertos cambios tributarios en la economía del país.
Eso porque el Gobierno alista una reforma tributaria que incluirá cambios para dar alivios en el pago del Impuesto a la Renta.
Una reforma tributaria que reduce los ingresos del Impuesto a la Renta significará recorte del gasto, sobre todo, de la inversión pública, que ya es baja, afirma Stambulsky.
Eso en un contexto en el que el programa financiero de Ecuador no es holgado, porque su necesidad de financiamiento es de aproximadamente USD 4.000 millones en 2023.
El proyecto de Ley
El nuevo proyecto de Ley económica urgente tratará deducciones progresivas para las personas naturales que pagan Impuesto a la Renta, ha explicado el director del Servicio de Rentas Internas (SRI), Francisco Briones.
El mecanismo de deducciones de gastos personales beneficiará a contribuyentes que tengan ingresos de entre USD 800 y USD 3.000.
El ministro de Finanzas, Pablo Arosemena, ya había adelantado que las deducciones para el Impuesto a la Renta que propondrá el Ejecutivo tendrán un tope de hasta USD 15.200 al año.
Además, dijo que habrá beneficios para los contribuyentes con cargas familiares.
La posibilidad deducir gastos personales estuvo vigente hasta 2021, cuando se aprobó una reforma tributaria que reemplazó este mecanismo por un descuento limitado de USD 5.327 anuales. Volver a implementar las deducciones para este impuesto le costaría unos USD 200 millones a las cuentas del Estado, según Briones.
No obstante, el Gobierno también está analizando focalizar algunos beneficios que recibe el sector productivo. Con estos cambios, el impacto en las cuentas fiscales de las deducciones sería de USD 50 millones.
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