Ecuador ya no disputará partidos amistosos hasta que empiecen las eliminatorias, en marzo próximo. El 17 de diciembre se sorteará el calendario y ese día se conocerán los rivales para llegar al mundial de Catar 2022.
A falta de cuatro meses para disputar el primer partido oficial, la selección ecuatoriana deja varias tareas pendientes.
El entrenador
La Federación Ecuatoriana de Fútbol ha sido incapaz de contratar un nuevo entrenador, tras la salida de Hernán Darío Gómez.
El acuerdo con Jürgen Klinsmann estaba listo, pero los dirigentes no aceptaron las condiciones del alemán para trabajar desde California y la contratación se detuvo.
Y al parecer, no había plan B. La FEF le ha encargado a Jorge Célico la dirección del equipo para cinco amistosos y el saldo no es malo: tres victorias y dos derrotas.
La Ecuafútbol había anunciado con bombos y platillos la implementación de un proyecto deportivo que marque el estilo de juego de las selecciones en todas las categorías. Sin embargo no ha podido contratar ni un nuevo director técnico y esa es, quizás, la principal tarea pendiente.
Un estilo de juego
Los últimos tres entrenadores que han pasado por la selección ecuatoriana tienen tres estilos de juego diferentes. Gustavo Quinteros intentaba un fútbol de mucha velocidad, pero que no le dio resultados. Hernán Darío Gómez priorizó la defensa y tampoco pudo ganar. Y Célico pretende un estilo ofensivo, donde el equipo salga a ganar siempre.
Sea cual sea el estilo que quiera implementar la Ecuafútbol, se debe trabajar con el transcurso de los partidos y sin amistosos hasta el inicio de las eliminatorias, queda muy poco por hacer.
Por eso urge la contratación del nuevo entrenador para que implemente un estilo acorde al grupo de jugadores que tiene Ecuador en el primer equipo y en las categorías menores, como la Sub 20 y Sub 17, que participaron en mundiales este año.
El capitán
Desde que asumió su cargo en agosto de 2018, Hernán Darío Gómez implementó una política de rotación de la cinta de capitán. Alexander Domínguez, Gabriel Achilier, Ángel Mena fueron algunos de los elegidos por el Bolillo.
Y Jorge Célico ha utilizado una estrategia similar. En los cinco partidos que dirigió, el argentino escogió a Fernando Gaibor, Xavier Arreaga y Ángel Mena como sus capitanes.
Es decir, Ecuador no cuenta con un capitán que comande al equipo dentro y fuera de la cancha.
La localía
Gustavo Quinteros dejó planteada una duda: ¿Quito debe seguir como la sede para los partidos de local de la selección ecuatoriana? El técnico argentino-boliviano aseguraba que la altura de Quito (2.850 metros sobre el nivel del mar) ya no eran una ventaja, porque la mayor parte de los seleccionados juegan en el llano.
Hernán Darío Gómez no quiso entrar en esa polémica, pero en su período, la Tricolor no jugó ningún partido en la capital.
De hecho, el último partido de Ecuador en el estadio Olímpico Atahualpa fue la derrota 3 a 1 ante Argentina, por la última fecha de las eliminatorias al Mundial de Rusia 2018, el 10 de octubre de 2017.
El nuevo entrenador y la dirigencia de la Federación Ecuatoriana de Fútbol deberán ratificar a Quito como la casa de la Selección o plantear una alternativa, como jugar las eliminatorias en Guayaquil.
El proyecto
Francisco Egas, presidente de la FEF, ha repetido que su dirigencia anunciará, antes del nuevo entrenador, al responsable del proyecto deportivo.
Egas lleva casi 10 meses en el poder y hasta el momento no se conoce ni un solo detalle de ese proyecto.
La dirigencia tiene claro que la Federación Ecuatoriana de Fútbol no contaba con ningún tipo de proyecto y que la mejor manera de avanzar es implementar un plan a futuro.
Pero no puede seguir perdiendo el tiempo. El 2020 será un año cargado de participaciones para la Selección, ya que Ecuador jugará la Copa América (en junio y julio) y además empezarán las eliminatorias a Catar 2022. Sin el rumbo claro, es muy difícil competir.
