La salud mental en el deporte es un tema que se trata cada vez más. Jugadores y equipos buscan con frecuencia el acompañamiento psicológico.
El psicólogo deportivo se ha convertido en un apoyo fundamental para los futbolistas. Los jugadores buscan fortalecer y cuidar su salud mental para rendir de la mejor manera dentro del campo de juego. E incluso fuera de él.
La salud mental ya no es un mito ni un tabú. En la actualidad se le da, casi, la misma importancia que la preparación física en un deportista.
Ahora es más común que los jugadores tengan sesiones programadas con su psicólogo de confianza o del equipo en el que juega. Esto, porque es necesario tratar lo cognitivo y emocional con los deportistas de alto rendimiento.
Estas dos áreas direccionan la manera de trabajar con el jugador. La cognitiva se enfoca básicamente en tomar toda la información que viene de fuera, procesarla y generar una decisión o una acción. En cualquier situación.
Luego viene la parte emocional, "que es donde nosotros trabajamos desde la motivación, pero también el poder sobrellevar malos partidos, malos momentos del deportista", detalla la psicóloga deportiva Liza Portalanza.
Por lo general, no controlar estas emociones o no saber hacerlo, desemboca en problemas físicos o mentales. El jugador puede generar un alto grado de tensión y lesionarse con una contractura, desgarro o algo más grave incluso.
Pero, también existe la posibilidad de exteriorizar las traumatologías con la parte emocional de la persona.
"Si hablamos de caso de depresión, de hiperagresividad o 'distress', por ejemplo, ya estamos hablando que está totalmente dentro del área emocional". Y hay que tratarlo.
"Lo emocional siempre va a estar por encima de lo cognitivo, por eso es la importancia de trabajar los dos a la par".
Liza Portalanza, psicóloga deportiva.
Así sucedió con el caso de Jhojan Julio. El extremo de Liga de Quito, en su paso por el fútbol brasileño, no logró adaptarse. Al tricolor lo traspasaron al Santos de Brasil en marzo de 2022. Era una gran contratación y un duro desafío para el futbolista. Y sufrió. Sufrió mucho.
En una entrevista con PRIMICIAS aseguró que "fueron momentos muy difíciles. Estuve solo y la pasé mal. Pero esos son los pilares que te ayudan a ser fuerte y a crecer como persona. Brasil me marcó".
Nueve meses después de su experiencia en el extranjero, el futbolista regresó a Liga de Quito. Jhojan Julio necesitó ayuda psicológica para superar esos momentos. Y Fernando Aguinaga, psicólogo de LDU, se convirtió en su mayor apoyo para "desahogarse".
"Mentalmente no volví bien. Estaba frustrado. Él fue una pieza fundamental. Estuvo conmigo desde el primer día", contó el mediocampista con mucha sinceridad.
Aguinaga trabaja en el primer equipo de Liga desde 2021, pero han sido más de 12 años en el club. En ese lapso se ha ido normalizando el hecho de visitar al psicólogo. "El 80% o 90% del plantel de jugadores" asisten a terapia.
Y no solo deben ir para sentirse respaldados o solucionar un tema puntual. Al contrario, deberían hacerlo con frecuencia. Liza Portalanza asegura que debe ser cada 15 días o una vez a la semana, dependiendo el caso.
Otro de los casos más recientes es el de exfutbolista italoargentino, Daniel Osvaldo, quien reveló que atraviesa una profunda depresión y tiene problemas con el alcohol y las drogas.
"Hace mucho tiempo que vengo lidiando con una depresión muy grande. Esa depresión me hizo caer en adicciones, alcohol y drogas. Y la verdad es que estoy en un momento en el cual mi vida se me está yendo de las manos".
Por eso, el acompañamiento psicológico es indispensable en los deportistas de élite, pues viven expuestos día a día y no todos tienen la capacidad de sobrellevar los problemas solos.
Aunque las psicólogas deportivas, Liza Portalanza y Anabel Barahona, coinciden en que no es igual tratar con deportistas que tener un tipo de terapia con personas que no lo sean.
"Los deportistas tienen que cumplir con una carga extra que es una disciplina deportiva, donde este extra tiene una carga tanto física como mental y emocional. Por eso el deportista se convierte en una persona extraordinaria", asegura Barahona, quien fue la psicóloga del Ministerio del Deporte y actualmente es docente en la Universidad del Azuay.
E incluso, para Portalanza el caso de los futbolistas es aún más particular porque "dentro de los diferentes deportes es un caso particular porque tener 50.000 personas gritándote en una cancha es algo que nadie más tiene. Ya desde ahí marca características totalmente distintas al resto".
La presión es mayor y el riesgo a sentirse frustrado, deprimido o que no ha llegado a dar el 100% de su rendimiento es más alto. Pero con el acompañamiento psicológico eso puede mejorar y sobrellevarse de mejor manera.
Las lesiones son otra causa para sentir episodios de depresión, miedo de no volver a jugar como antes o hasta privarse de hacerlo para no sufrir otra lesión. Ahí también se debe acompañar al jugador. Durante todo el proceso.
Pero la presión, también es otro de los problemas más comunes en el fútbol. El sentirse presionado afecta a la salud mental del jugador.
"Generalmente, nos situamos en el jugador que es titular, pero tienen un montón de jugadores que están al cambio o que todavía no tienen oportunidad. Ellos tienden a estar mucho o muy cerquita de estados depresivos". Ninguno está exento.
Por ello, el acompañamiento psicológico se ha convertido en una pieza fundamental en el fútbol. Los jugadores y sus respectivos equipos trabajan cada vez más y de mejor manera en la salud mental.
