Fue por pedido de Marcos Motta, abogado de los seis miembros del Directorio de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF), que el 24 de abril decidieron remover a Egas de su cargo como presidente de la institución.
La investigación por parte de FIFA también se debe a que Egas acudió a la justicia ordinaria mediante una acción de protección. El dirigente y sus abogados tomaron esa medida para evitar que se lleve a cabo el Congreso Extraordinario de FEF, realizado el 1 de mayo, en el que se reestructuró el Directorio.
En ese Congreso, los representantes de los clubes y asociaciones afiliadas a la FEF ratificaron a Jaime Estrada como nuevo presidente de la Ecuafútbol. La decisión se la tomó de forma unánime: 46 votos a favor y ni uno en contra.
Justamente, Egas no participó de esa sesión y la calificó de "ilegítima". El directivo había presentado el 30 de abril una acción de protección. A pesar de que el Juez Cristian Silva aceptó las medidas cautelares de que no se desarrolle el Congreso, finalmente se instaló de forma virtual.
Según publicó el diario El Comercio, que tuvo acceso al documento de FIFA, destaca que "(…) una de las responsabilidades más importantes de la FIFA es salvaguardar la integridad y la reputación del fútbol en todo el mundo, y su denuncia (de Motta) demuestra su compromiso con nuestros valores y principios".
Asimismo, el informe indica que la investigación en contra de Egas se da por una "posible violación del Artículo 59 apoderados dos y tres de los Estatutos de FIFA, que tienen que ver con 'obligaciones relativas a la resolución de disputas'".
El proceso de investigación estará liderado por la Comisión de Disciplina de FIFA y el Tribunal de Arbitraje del Deporte (TAS, por sus siglas en francés), máxima instancia de la justicia deportiva a nivel mundial.
Actualmente, tanto Francisco Egas como Jaime Estrada atraviesan procesos de investigación en la Confederación Sudamericana de Fútbol. Incluso, el 11 de junio, ambos directivos fueron convocados para comparecer ante el Tribunal de Disciplina a una reunión que se llevó a cabo el 17 de junio.
Según una fuente cercana a FEF, en la reunión no se estableció ninguna resolución. Por lo que la disputa continúa sin una fecha establecida para un desenlace final por parte de Conmebol.
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