El caso por irregularidades en la compra de insumos en hospitales de Guayaquil tomó un nuevo rumbo para los 15 procesados. Ahora el delito a investigar es el de delincuencia organizada, que se sanciona hasta con 10 años de cárcel.
Entre los múltiples casos de corrupción originados en la emergencia sanitaria, hay uno que vincula a los tres hermanos Bucaram Pulley (Jacobo, Dalo y Michel) y otros 14 procesados.
Hasta ahora, la Fiscalía los había acusado del delito de asociación ilícita.
Pero este 7 de octubre de 2020 se cumplió la audiencia de reformulación de cargos por este proceso, a pedido de la fiscal Claudia Romero. Ella solicitó cambiar la figura del delito penal.
Acogiendo esta solicitud, el juez de garantías penales de Guayas, Ronald Guerrero, acusó a los procesados de delincuencia organizada.
Bajo esta nueva figura, el caso cambia sustancialmente, pues ahora los acusados enfrentan una pena mayor. La sentencia es de 7 a 10 años en prisión. Además la instrucción fiscal durará otros 30 días.
Los abogados de la familia Bucaram Pulley rechazan la reformulación de cargos. Por ejemplo, la defensa de la expresentadora de televisión Gabriela Pazmiño argumenta que ella no tiene relación alguna con los otros procesados como Daniel Salcedo.
"El nombre de Pazmiño no aparece en un video, fotografía o bitácora y no tiene ningún tipo de participación o relación comercial", señala el abogado Francisco Onofa.
Tanto Pazmiño como su esposo Abdalá Bucaram Pulley se encuentran prófugos en Estados Unidos.
Mientras que Salcedo guarda prisión preventiva en Quito, y Jacobo Bucaram Pulley ha solicitado ser trasladado hasta una cárcel en Guayaquil.
Por otra parte, el juez Guerrero, encargado de reformular los cargos, se encuentra bajo protección tras recibir amenazas de muerte.
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