Edificios completos reducidos a escombros y llanto en las calles son los resultados de un potente terremoto de magnitud 7,7 en Turquía. El sismo sacudió el territorio turco la madrugada del 6 de febrero y horas después ocurrió otro movimiento telúrico de similar potencia.
Hasta el momento se registran más de 900 muertos, solo en Turquía, pero como el terremoto fue en una zona cercana a Siria, este último país también suma más de 590 víctimas mortales.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, fue el encargado de anunciar el último balance de muertos y heridos en Turquía. Los trabajos de rescate continúan en ambos países, por lo que la cifra de víctimas podría aumentar con las horas.
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