Durante 2021, el porcentaje de personas en situación de pobreza por ingresos fue de 28,85%. Esto significa más de cinco millones de personas, viviendo en Ecuador, con un ingreso diario inferior a USD 2,83.
Al revisar las cifras para determinados grupos poblacionales, desde un enfoque interseccional, por género, edad y auto identificación étnica, se observa que la pobreza afecta en mayor medida a las niñas indígenas, afroecuatorianas y montuvias.
El porcentaje de niñas indígenas en situación de pobreza alcanza el 64,38%, entre las afroecuatorianas el 51,14% y en las montuvias el 52,43%. Con un nivel similar se encuentran los niños indígenas (65,07%), afroecuatorianos (48,81%) y montuvios (49,29%).
Después, se encuentran las personas jóvenes y las adultas; y en todos los casos la pobreza es más fuerte en mujeres y en pueblos y nacionalidades.
Este es el rostro de la pobreza en el país; está marcado por las desigualdades que se generan en el machismo y el racismo; y por la falta de atención de la infancia.
Empezar a transformar está realidad exige ampliar los servicios públicos de desarrollo infantil y las transferencias monetarias destinadas a hogares con niños, niñas y adolescentes; incrementar recursos para la educación pública; generar políticas de inclusión laboral para jóvenes y mujeres; mejorar el acceso a financiamiento y tecnología en zonas rurales y urbano marginales; y ante todo combatir la discriminación que aún persiste en Ecuador.
Las opiniones expresadas por los columnistas de PRIMICIAS en este espacio reflejan el pensamiento de sus autores, pero no nuestra posición.
Lo último